sábado, 29 de marzo de 2014

Nunca le pidas a un escritor que lea en voz alta sus creaciones,
es como pedirle que diseque su corazón en vivo.
Y perdón si te digo, 
que todo lo que escribo, 
una vez que sale de su nido, 
me parece nocivo.
She was a unfinished song, 
her eyes spoke louder. 
The redness in them, 
buried me.

She meant well, 

but her heart was on her sleeve.
To ready to leave, 
I left her.
Playing dumb - for me - was always easy. 


viernes, 21 de marzo de 2014

Entre la oscuridad de la habitación, le tiene paciencia a mis ronquidos y mis berrinches. Escucha mis teorías y en vez de quedarse anonadado por sentirse menor, me pelea. Y eso me vuelve loca. De amor. En vez de sentirse intimidado por la intensidad que mis palabras conllevan, me pelea y me enamora entre sábanas y maullidos. ¿Cómo no amarlo? me pregunto. La mano que pone en mi hombro cuando estoy discutiendo y subo la voz, intentando calmarme, que me pone más loca porque no me gusta ser callada. Menos por un hombre. Mi orgullo femenino, y me honestidad bruta. Bruta. La verdad que se me escapa de los labios y le golpea la cara, no lo achica. Lo hace más fuerte. ¿Cómo no amarlo? me pregunto. 
Mis inseguridades que se muestran a través de las grietas del concreto de mi corazón, fuego ardiente que apaga a besos. No quiero ceder, por temor a caer un precipicio sin retorno, pero ¿qué tal si ya caí?. No quiero entregarme, porque peco de sometimiento, y sin embargo mis parábolas sobre el amor se mantienen firmes como los valores que tenía de bandera en mi adolescencia.
Dos individuos que comparten su vida, no que se fusionan. La posesión como pecado, y el amor como una gloriosa representación de que si duele, no lo vale. Esas son patrañas de la racionalización de un dolor que jamás debería haber surgido.  El amor representado no como un favor, sino como una elección diaria. 

Te amo tanto, que no duele.

Corazón de mamá.

Los otros días estaba enferma, 
y le dije que no me besara, no me abrazara.
Tenía miedo del contagio.

Y ella, me abrazó y me besó igual, 
porque tiene corazón de mamá.
Se contagió, y se enfermó.
Pero nunca jamás me culpó.

Porque tiene corazón de mamá. 

Y yo la abracé, y la besé. 

Lloré, por la culpa.
Pero ella nunca jamás se quejó. 
Porque tiene corazón de mamá.

Y no quiero extrañarla, 
mucho menos perderla.
Porque necesito, 
ese corazón de mamá.
Mis mejores poemas, han sido escritos para él. 
Aunque él no existía, 
su nobleza era invisible,
y mi corazón se rindió ante mi propia
Mis mejores poemas, han sidos escritos para él, 
aunque el amor se encontraba diluído en agua, 
2 partes iguales a 0.
Y sin embargo, 
mis mejores poemas han sido escritos para él.